Llora el Silencio.

Llora el Silencio.

Llora el silencio entre la oquedad de la tristeza
y esas lagrimas que corren, mutiladas de desolación;
hacen mas implacable el tiempo de tu olvido
y ese me condena sin piedad.

Nada tengo ya, ni tan siquiera,
la sonrisa de tu amor,
hoy tan sólo tengo tu desprecio,
alimentado con desdeño y desilusion.

Ya no seas injusta,
escucha el clamor de las aves que te llaman,
escucha del viento sus palabras
y escucha las mias que aun te ama.

Y si algún dia entiendes, lo que hoy te digo,
mira fijamente al cielo
y entre nubes descubriras dibujado,
mi triste corazon bañado en llanto.

Que vive sin ti, en triste quebranto
y llorando por tu ausencia.

Dos Luceros.

Dos luceros.

Hoy, he visto dos luceros brillar
en lo más alto del hermoso cielo
y son dos luceros de amor,
son bellos luceros de ilusión.

que han nacido del deseo,
que han nacido de lo más profundo del alma
y son pequeñas luces enamoradas,
matizadas de bellos colores
de dos vidas, de dos amores.

Que entre lo bello del mar;
sus besos y abrazos se perderán,
para ser felices
y para nunca, su alma separar.

Clemencia.

Muriendo entre el destino de mi soledad
y entre la tristeza que embriaga mi alma,
quiero decirte amor mío;
que nada mitiga el dolor de tu olvido.

Porque mis adentros ya murieron,
porque mis esperanzas ya se fueron
y se han perdido entre el horizonte,
han muerto, sin volver a verte.

Y es que nunca volviste,
aunque tantas y tantas veces;
clame a tu infinito amor
y tú nunca me escuchaste.

Me dejaste morir en el dolor…

Nada mitiga ya, lo que tú dejaste llorando;
ni tan siquiera, los últimos besos que me regalaste,
porque la miel tan dulce que había en ellos;
ya se ha secado, ya se ha borrado.

Por eso muero entre el destino que forme,
y entre las ilusiones que nacieron de mí,
entre besos enamorados llenos de pasión
y que ahora son nada,
porque el viento se los llevo.

Camino de Petalos.

He cortado para ti olorosas Rosas,
y he cubierto los caminos
con sus hermosos pétalos,
He puesto la dulce melodía de las aves
para que cuando pases
inundes de Alegría mis tristes pesares.

He dicho a los Arboles mas frondosos
que muevan sus ramas con el viento,
y a sus hojas
que caigan como pequeños trozos de mi voz,
y hablen a tu oído
para que sepas que soy yo.

El que ha hecho todo por ti,
el que ha sufrido largamente por ti,
el que esperando constantemente tu llegada
se resiste a morir.

Si, morir en la soledad,
morir en el Abandono,
Sufriendo dolores del alma
llorando lágrimas amargas.

Por eso he cortado para ti
esas Rosas Hermosas,
para que tan solo en mi imaginación
puedas seguir viviendo,
para que mi alma resista hasta el fin
de lo que ahora estoy sufriendo.

Porque no estás todavía aquí,
mi pequeña y hermosa
Adoración Mía.

Albricias.

Eres la ternura hecha carne,
que el cielo regalo,
para hacer feliz a tus padres,
y llenarlos de amor.

Muchos besos y abrazos te darán
por la felicidad que sentirán,
y con todo su tierno amor,
siempre te cobijaran.

Has llegado desde el cielo,
quizás, de una hermosa galaxia,
para iluminar con tu sonrisa,
y todas tus hermosas gracias.

Eres el más preciado regalo,
que ellos estaban esperando,
eres el amor hecho realidad,
eres toda su felicidad.

Siempre estarán a tu lado,
y de tu mano siempre caminaran,
serán tu luz y tu Guia,
en el largo camino al andar.

Albricias y muchos hurras,
por tu feliz llegada hago yo,
y para ti hago estos versos,
como un humilde servidor.

Sé feliz siempre,
Y ante las adversidades,
nunca llores, ni tampoco temas,
camina siempre adelante,
recuerda que ahí estarán tus padres,
hasta su ultimo fin, para ayudarte.

A ti.

A ti.


Ensalzado me hace sentir;
Bella dama, dueña de mi jardín,
al saber que mis Humildes letras,
han gustado a su alma,
letras, que fueron hechas con tinta de miel;
de la colmena más fina
y con la más fina delicia,
como un Pequeño Homenaje;
al amor tan grande que hay en ti,
que cobija los cielos de mi pasión
y mitiga los dolores incesantes,de mí afligido corazón.

A mi patria

Estas siempre ahí patria querida
y escucho el unisonó de tu voz;
que cada uno de tus hijos,
exclama siempre tu nombre con honor.

Verde blanco y rojo;
representan todo de ti,
fuerza sangre y fortaleza,
símbolos de independencia
y revoluciones pasadas,
que viven en la historia;
plasmadas en tu bandera.

Y en el centro el águila
altanera y muy jubilosa,
que hace más quererte,
porque eres la patria mía;
símbolo de mi raza.

"Mexicanos al grito de guerra"
tu himno exclama con valor,
fervientes y valientes mexicanos;
que murieron, patria querida,
por hacerte una mejor nación,
independiente, fuerte y indomable,
ante cualquier invasor.

He hecho para ti
este humilde poema,
porque me nace desde el fondo;
de mi orgulloso corazón,
patria querida, tierra mía,
como un mexicano que soy.

Y si algún día muero lejos de ti
y en mi muerte todo el amor que yo te dedico,
que lleven mi cuerpo hasta ahí,
a mi patria, mi lindo México.